Dime qué café tomas y te diré qué personaje de serie eres

¿ERES DE ‘CAPUCCINO’?

Este es tu café preferido, el que tomas en la cafetería de al lado de tu casa, el que saboreas mientras haces un repaso del día o mientras compartes con los demás las penas y las alegrías de la vida.

Pues este también era el café preferido de Rachel, Monica, Ross, Phoebe, Chandler y Joey, los protagonistas de la mítica serie Friends. El café Central Perk era su lugar de encuentro y llegó a convertirse en un escenario fundamental de esta sitcom. Allí, con las tazas de capuccino sobre la mesa –algunas veces acompañadas de unas cupcakes—, tenían lugar las conversaciones y situaciones más desternillantes.

CON LECHE Y CARGADO, POR FAVOR

Hasta que no te tomas el café, no estás en el mundo… Es olerlo y comenzar a transformarte de forma inmediata: pasas de la ira y las malas contestaciones, a la sonrisa y la amabilidad que te caracterizan.

Y así es Penny, la vecina rubia más famosa de la televisión gracias a las serie The Big Bang Theory. La aspirante a actriz necesita ese café nada más levantarse. Y si no lo tiene… el mal humor se apodera de ella y claro, ¿con quién lo va a pagar? Pues con sus oportunos vecinos.

TU CAFÉ, DESCAFEINADO

Aún recuerdas aquella noche en la que apenas pegaste ojo y culpaste al café que te habías tomado a media tarde. Desde entonces, has cogido miedo a sus efectos secundarios pero no quieres renunciar a su sabor y al placer de una taza caliente tras un duro día. Por eso, tú café es descafeinado.

En este aspecto —que quede claro que solo en este aspecto— eres como el ‘rarito’ protagonista de The Big Bang Theory, Sheldon Cooper. Cuando, convencido por Penny y Leonard, decide tomarse una taza cree haber caído en una grave adicción y pierde el control. Y, aunque solo sean manías y obsesiones, lo mejor es evitar ese sufrimiento a él mismo y a los demás.

CAFÉ SOLO EN TAZA PEQUEÑA

Lo reconoces: eres un sibarita del café y no estás dispuesto a tomar cualquier tipo y de cualquier manera. Te gusta disfrutar de la bebida y por eso prefieres tomarlo solo, caliente y apenas —o nada— endulzado.

Entonces eres como Manny Delgado, el hijo de Gloria —Sofía Vergara— en la serie Modern Family. El niño regordete y maduro, a pesar de su corta edad, no se resiste a tomar su pequeña taza de café solo. Seguramente, sus raíces colombianas son las culpables de sus exigencias con esta infusión.

ALREDEDOR DE UN CAFÉ CON LECHE

Las tardes de invierno son perfectas para encontrar refugio en una cafetería, entorno a una taza de café con leche y una buena conversación entre amigas. ¿Es este uno de tus planes preferidos para los días de frío?

Entonces te puedes identificar con las chicas de Sexo en Nueva York. Reunidas en una elegante y moderna cafetería —no podía ser para menos— las cuatro amigas se contaban sus últimas batallitas mientras tomaban una taza de café latte.

Y si no era al abrigo de un local, pudimos verlas disfrutando de sus cafés sentadas en un banco o paseando, porque ellas pusieron de moda tomar el café en la calle, en vaso de plástico.

SOLO Y A TODAS HORAS

Lo tomas desde que te levantas y, si se da el caso, justo antes de irte a la cama. El café es la gasolina con la que te pones en marcha y no concibes el día a día sin él. Por eso te lo preparas americano, más ligero, pero con todo su sabor.

Te sentirás plenamente identificado con las ‘espídicas’ Chicas Gilmore. A cualquier hora del día, madre e hija acuden a su bar preferido, el Luke’s, a tomarse una gran taza de café. Uno de estos personajes, Lorelai, la madre, llega a reconocer en un capítulo:”Mi café es mi oxígeno, si dejo de tomarlo, dejo de hacer todo lo demás”.

IMPRESCINDIBLE EN EL TRABAJO

Antes de entrar en la oficina, a la hora del descanso o durante una reunión: no hay jornada laboral sin él. El café da sabor a los descansos, a las conversaciones de los lunes comentando el fin de semana o a la desconexión en los días malos.

Así lo siente también Michael Scott, el jefe de la serie de humor The Office. Una taza de café suele presidir la mesa de su despacho, al igual que la de casi todos sus empleados. Él mismo sentencia en un capítulo: “El café es un gran incentivador en la oficina”.

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